sábado, 8 de marzo de 2014

Carlos Arteaga Morales

El psicoanálisis como construcción teórica, técnica, antropológica y clínica genera un entramado complejo y sumamente abarcativo de la experiencia psíquica individual interna, de interrelaciones hacia los vínculos próximos, en el contexto social y en la inercia cultural; con las formas de abordaje en la clínica, el arte, la política, etc. Con todo ello, no podemos considerar que sea la única forma de acercamiento al conocimiento ni a las experiencias objetivas y subjetivas de la existencia. Encontramos una gran cantidad de áreas de las humanidades con las que se interrelaciona, algunas incluso muy cercanas a la ciencia “dura”; desde una posición que busca ser integradora, en la psiquiatría se pueden encontrar las manifestaciones claras del determinismo psíquico, la clínica metapsicológica, los conflictos inconscientes y se verifica en la realidad la teoría psicoanalítica. Sin embargo, se verifica también la realidad de las neurociencias, las variaciones del pensamiento, las emociones y la conducta a partir de desequilibrios neurobioquímicos; y las intervenciones farmacológicas modifican por ejemplo de manera más evidente en las psicosis las formas de expresión tópica, dinámica, defensiva y relacional de un sujeto; lo evolucionan desde la posición esquizoparanoide a la depresiva, modifican la expresión del self, etc. 
La fenomenología en un esfuerzo aséptico facilita la comprensión de la continuidad psíquico-orgánica, no en una condición lineal y polar sino en una forma circular que en su suceder a través del tiempo se construye y modifica por sus propias interacciones y por las del exterior (contraria a la dicotomía platónica mente-cuerpo). Requiriendo para además de una visión teórico-clínica no excluyente, una construcción epistemológica de enlace, que fundamente en la teoría la verificada realidad de que una intervención desde cualquiera de estas posiciones (psicodinámica u orgánica) puede modificar la experiencia vivencial, y justifica la interdisciplinariedad del trabajo clínico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario